La presidenta argentina deberá permanecer al menos 48 horas en cuidados intensivos.
Fue intervenida en completo hermetismo en la clínica Favaloro de Buenos Aires.
Seguidoras de la presidenta argentina se reunieron en los alrededores de la clínica Favaloro de Buenos Aires.
Los médicos que intervinieron este martes a la presidenta argentina, Cristina Fernández, para drenar un hematoma craneal, concluyeron la operación, que se prolongó durante algo más de hora y media.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, confirmó que la "presidenta se está recuperando de la anestesia" tras la intervención quirúrgica, durante una breve mención al estado de la mandataria en un acto público.
Scioli no dio más detalles sobre la operación a la que se ha sometido Cristina Fernández, que descansa en la clínica universitaria de la Fundación Favaloro y que, según estimaciones de los especialistas, deberá permanecer al menos 48 horas en cuidados intensivos.
"Hay que esperar el parte oficial", agregó el gobernador, que insistió en que "deseamos una pronta recuperación" a la presidenta.
Tras la operación, la presidenta dejó entrever que quería descansar en El Calafate, según reportó el corresponsal de Cooperativa en Buenos Aires, Ulises Lencina.
Los hijos de la presidenta, Máximo y Florencia, y su madre, Ofelia, esperaron el resultado de la operación en la clínica, en la que fue desalojado el sexto piso para acoger a la mandataria y a sus acompañantes.
El equipo médico de la clínica Favaloro diagnosticó el pasado sábado a la mandataria un hematoma craneal provocado por un traumatismo y le recomendó 30 días de reposo, pero el lunes decidió operarla después de haber detectado nuevos síntomas, como un hormigueo y una leve y transitoria pérdida de la fuerza muscular en el brazo izquierdo.
El vicepresidente argentino, Amado Boudou, ha asumido la máxima jefatura del Estado debido a la lesión cerebrovascular de Fernández.
