Trabajadores estatales protagonizan primer paro contra Macri en Argentina
La movilización es protesta por el despido masivo de funcionarios durante los dos primeros meses del gobierno.
Las movilizaciones se han centrado en Buenos Aires.
La movilización es protesta por el despido masivo de funcionarios durante los dos primeros meses del gobierno.
Las movilizaciones se han centrado en Buenos Aires.
A dos meses de haber asumido en el cargo, el presidente argentino Mauricio Macri enfrenta este miércoles su primer paro nacional, que fue convocado empleados representados por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Argentina.
La movilización es en protesta por el despido masivo de trabajadores estatales desde la asunción de Macri como jefe de Estado, además de exigir mejoras salariales y de las condiciones de trabajo.
Además, se repudia el reciente endurecimiento de los protocolos para disolver protestas en las calles implementado por el nuevo gobierno.
Según cálculos sindicales, del sector público han tenido que marcharse unos 20.000 empleados en los últimos meses pero el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, ha anunciado que se estudia despedir o no renovar los contratos de hasta 25.000 más.
Aunque los dirigentes de ATE habían descartado llamar a cortar las calles, centenares de huelguistas, principalmente de organizaciones de izquierdas, cerraron este miércoles muchas de las principales vías del centro de Buenos Aires e hicieron muy complicada la circulación desde primera hora de la mañana.
La diputada de izquierda, Myriam Bregman, indicó que "en una jornada de lucha como es el día de hoy, en una jornada de paro nacional estamos junto a los trabajadores diciéndoles que tienen su derecho a manifestarse, son derechos constitucionales, son derechos garantizados por los derechos humanos y es nuestra obligación acompañarlos".
Hasta el momento, las fuerzas de seguridad no han aplicado las nuevas normas para disolver protestas en las calles y las movilizaciones se han centrado en Buenos Aires.
Además, la huelga coincide con la llegada al país del presidente francés, François Hollande, cuya agenda incluye varios actos oficiales durante la tarde.