Dos de los sindicatos mayoritarios del sector público de Argentina las emprendieron este jueves por separado contra los múltiples despidos de funcionarios anunciados en los últimos días por el Ejecutivo de Mauricio Macri y amenazaron con llevar a la Justicia los ajustes de personal.
En una entrevista con Radio del Plata, el máximo responsable de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), Andrés Rodríguez, calificó de "barbaridad" la rescisión de contrato de 2.000 trabajadores del Senado anunciada por la vicepresidenta, Gabriela Michetti.
Rodríguez adelantó que desde la dirección ejecutiva del gremio ya están valorando qué medidas judiciales tomar para frenarlos.
Desde el Gobierno expresan que el número de funcionarios es excesivo y critican que las instituciones se habían llenado de militantes kirchneristas, especialmente provenientes del sector de La Cámpora, la agrupación impulsada por el hijo de la ex presidenta Cristina Fernández, Máximo Kirchner.
Según Michetti, desde el Ejecutivo se planea también despedir a trabajadores en los ministerios.
Rodríguez replicó que "solo existe una minoría de empleados públicos que no trabajan" y lamentó que no se haya evaluado "nada" a la hora de rescindir los contratos laborales de los empleados, por lo que insistió en que llevarán esos despidos a la Justicia.
Por su parte, el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Hugo Godoy, advirtió esta mañana, también en conversación con Radio del Plata, que su sindicato no va a permitir que el Gobierno descalifique a los trabajadores públicos mediante despidos "masivos".
Paralelamente a las protestas sindicales, los trabajadores del Centro Cultural Kirchner convocaron una concentración para hoy en señal de protesta contra la decisión del Ejecutivo de no renovar el contrato del 80 por ciento de la plantilla de la institución, que vencía el pasado 31 de diciembre.