Silvina Batakis, hasta ahora secretaria de Provincias dentro del Ministerio del Interior, será la nueva ministra de Economía de Argentina, después de que Martín Guzmán renunciara el sábado como titular de la cartera en medio de las tensiones que vive el oficialismo y la complicada situación económica que sufre el país.
Este nombramiento se produce luego de las intensas conversaciones que el mandatario Alberto Fernández ha mantenido en su residencia, incluida una charla telefónica en la noche del domingo con la vicepresidenta, Cristina Fernández.
Licenciada en Economía y con un máster en finanzas Públicas Provinciales y otro en Economía Ambiental, Batakis ostentaba hasta la actualidad la secretaría de Provincias, dentro del Ministerio del Interior, que comanda Eduardo 'Wado' de Pedro, uno de los ministros del ala kirchnerista, y fue ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires entre 2011 y 2015, durante el Gobierno provincial de Daniel Scioli, actual ministro de Desarrollo Productivo.
Tras más de 24 horas de rumores sobre quién tomaría las riendas del más complicado ministerio del país -de forma paralela al silencio oficial por parte del gobierno-, no fue hasta bien entrada la noche del domingo que la vocera presidencial, Gabriela Cerruti, confirmó el nombre de la elegida a través de la red social Twitter.
"El Presidente @alferdez designó a Silvina Batakis al frente del Ministerio de Economía. Batakis es una reconocida economista que cumplió esa función en la provincia de Buenos Aires entre 2011 y 2015", escribió la alta funcionaria.
El peronista Frente de Todos arrastra desde hace meses grandes diferencias entre el sector kirchnerista que encabeza la vicepresidenta Fernández, y el núcleo del mandatario y sus ministros más próximos, entre ellos Guzmán, cuya gestión, principalmente el acuerdo firmado en marzo con el FMI, fue foco de fuertes críticas de parte del kirchnerismo.
Unas divisiones que no hacen sino acrecentar la incertidumbre por el delicado escenario económico que arrastra Argentina, que sigue sin erradicar la altísima inflación, la devaluación del peso y la escasez de dólares y que tiene que cumplir con las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional, en el polémico acuerdo por el que el país refinanció el crédito de 44.000 millones de dólares otorgado en 2018, durante el Gobierno de Mauricio Macri.