Se alista masivo reencuentro de familias separadas por la guerra.
Gobiernos coreanos preparan jornadas del 20 al 25 de febrero.
Delegados de ambas naciones se reunieron esta semana para manifestar su voluntad de abrir una etapa duradera de entendimiento.
Tras cerrar con éxito sus primeros contactos de alto nivel en años, las dos Coreas afrontan una semana decisiva en la que celebrarán un histórico reencuentro de familias separadas por la guerra que enfrentó a ambos países hace seis décadas.
Un equipo de 15 miembros de Corea del Sur llegó al monte Kumgang, al sureste de Corea del Norte, para comenzar a trabajar junto con funcionarios de Pyongyang en los preparativos del reencuentro familiar que tendrá lugar entre el próximo jueves 20 y el martes 25 de febrero.
Ambas naciones del Norte y Sur despejaron las dudas generadas sobre la celebración del encuentro al cerrar con éxito sus primeros contactos bilaterales de alto nivel en siete años, acordando llevar a cabo las reuniones familiares tal y como estaba previsto.
También se comprometieron a "dejar de difamarse" mutuamente, en referencia a los habituales cruces de amenazas y acusaciones, y también abrieron la puerta a nuevos diálogos de alto nivel sobre intereses comunes.
El histórico acercamiento se ha acogido con expectación en Corea del Sur, donde se espera que ambos vecinos logren finalmente iniciar una etapa de paz estable y duradera tras años marcados por una tensión casi constante.
