Pervez Musharraf expresó, además, su deseo de abandonar la jefatura del Ejército y jurar como presidente civil antes del 9 de enero del próximo año.
En una rueda prensa en Islamabad, el jefe de gobierno pakistaní, el general Pervez Musharraf, expresó su voluntad de efectuar elecciones legislativas antes del próximo 9 de enero, fecha que también lo debería ver como presidente ya jurado y fuera del Ejército.
Musharraf anunció que las asambleas nacionales se disolverán el jueves de la próxima semana y que también lo harán las cámaras provinciales, para dar paso a un gobierno provisional que dirigirá el país hasta la fecha exacta de las elecciones, que deberá ser fijada por la Comisión Electoral.
El general aprovechó también la ocasión para desafiar a sus opositores diciendo que "reto a cualquiera a que demuestre que en algún momento he ido en contra de la Constitución".
Musharraf insistió en que los medios de comunicación en Pakistán son "libres" e "independientes" y lanzó sus dardos contra el ex presidente del Tribunal Supremo Iftikhar Chaudhry, a quien responsabilizó de haber creado la "inestabilidad" política que reina en el país.
El mandatario pakistaní justificó además la declaración del estado de excepción, diciendo que lo hizo para salvar "la transición democrática" del país y aseguró que la suspensión de las garantías constitucionales fue un "requisito" para "poder mantener elecciones libres y transparentes", no obstante, haberlo hecho haya significado una difícil decisión. (EFE)
