La fuerza antinarcóticos de Bolivia decomisó 2,3 toneladas de cocaína y 105,8 toneladas de marihuana en operaciones efectuadas en los dos primeros meses del año, informó este domingo el viceministerio de Defensa Social y Sustancias Controladas.
Los agentes de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico destruyeron nueve laboratorios de purificación de cocaína, ocho de reciclaje de la droga y 629 de fabricación de estupefacientes en 1.798 operaciones realizadas entre enero y febrero, según un informe de ese viceministerio.
En las intervenciones fueron detenidas 466 personas por presuntos delitos de narcotráfico y se confiscaron dos avionetas.
La fuerza de militares y policías a cargo de la destrucción de cultivos ilegales de hoja de coca destruyó 266,8 hectáreas de esas plantaciones desde enero hasta el 1 de marzo, añade el informe.
La hoja de coca tiene en Bolivia usos culturales, rituales y medicinales reconocidos en la Constitución, pero una parte de la producción de la planta es desviada al narcotráfico para la fabricación de cocaína.
Un estudio presentado en julio del año pasado por la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC) certificó que Bolivia tenía unas 20.200 hectáreas de coca en 2015.
El Gobierno boliviano pretende aprobar una ley para ampliar de 12.000 a 22.000 las hectáreas legales de coca, lo que ha sido cuestionado por opositores y analistas.
En 2016 la fuerza antidrogas decomisó 29,6 toneladas de cocaína y 118,1 toneladas de marihuana en 11.858 operaciones.