El ex presidente boliviano Evo Morales se reunió en Buenos Aires con delegados de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), para definir al candidato presidencial que competirá en las elecciones del 3 de mayo.
Morales, quien solicitó refugio al Gobierno argentino, firmó en las últimas horas un acuerdo por la unidad y el fortalecimiento del MAS de cara a las elecciones convocadas para el 3 de mayo con los precandidatos David Choquehuanca, Luis Arce Catacora y Diego Pary Rodríguez, al tiempo que Andrónico Rodríguez no pudo arribar a tiempo Buenos Aires para el encuentro.
Los precandidatos acordaron "mantener una férrea unidad" del movimiento político "para impulsar una propuesta electoral unitaria que responda a los intereses del pueblo y proyecte a Bolivia hacia el futuro", sostiene el documento firmado.
Asimismo, los dirigentes se comprometieron a "acatar de manera disciplinada" las decisiones de la reunión de alto nivel del MAS-IPSP que se celebrará hoy domingo, 19 de enero, en Buenos Aires, en la que se "tomará la última decisión junto a los movimientos sociales y pueblo boliviano en general respecto al binomio que representará en las próximas elecciones".
Los sectores sociales que forman parte del MAS decidieron proponer al ex canciller de Bolivia David Choquehuanca como candidato a la Presidencia, y al joven líder cocalero Andrónico Rodríguez para la Vicepresidencia, informó este viernes a los medios la legisladora por este partido y presidenta del Senado, Eva Copa.
Las nuevas elecciones
Bolivia celebrará el próximo 3 de mayo nuevas elecciones tras los truncados comicios del 20 de octubre pasado, en los que Morales fue reelecto por cuarta vez como mandatario, pero el resultado fue cuestionado por la oposición y la Organización de Estados Americanos (OEA) determinó que hubo "irregularidades".
Los próximos comicios serán los primeros a los que asistirá el MAS sin Evo Morales en las casi dos décadas en las que ese partido político ha participado en elecciones.
Morales renunció el 10 de noviembre presionado por las Fuerzas Armadas, en lo que el ex presidente calificó como un "golpe de Estado".