Los bolivianos votaron este domingo mayoritariamente en contra de modificar su Constitución para permitir una nueva reelección del presidente Evo Morales, según los primeros sondeos, que otorgan al No entre un 51 y un 52, 3 por ciento y al Sí entre un 47,7 y un 49 por ciento.
Las encuestas, difundidas cuatro horas después del cierre de los colegios, fueron realizadas por las empresas Ipsos y Equipos Mori por el sistema de recuento rápido.
Más de 6,5 millones de bolivianos estaban llamados este domingo a votar en este referendo, en el que se consultó sobre una reforma constitucional para ampliar de dos a tres los mandatos presidenciales consecutivos permitidos, lo que posibilitaría que el presidente Morales pudiera volver a ser candidato.
La encuesta de Ipsos para el canal privado ATB adelanta la victoria del No con un 52,3 por ciento frente al 47,7 por ciento obtenido por el Sí, mientras que la de Equipos Mori para la red Unitel, Red Uno y el diario El Deber prevé un 51 por ciento para el No y el 49 por ciento para el Sí.
Según ambos sondeos, la opción oficialista solo habría ganado en los departamentos de La Paz, Cochabamba y Oruro, mientras el No se habría impuesto en Santa Cruz, Potosí, Chuquisaca, Tarija, Beni y Pando.
Las regiones con porcentajes más altos de oposición a la propuesta de reforma constitucional fueron, según las encuestas, los de Tarija, Beni, Potosí y Santa Cruz, donde el No obtuvo apoyos en torno al 60 por ciento.
Gobierno boliviano habla de "empate técnico"
El gobierno boliviano afirmó que hubo un "empate técnico" en el referendo constitucional sobre la reelección de Morales e indicó que las cifras oficiales podrían variar con respecto a las encuestas por recuento rápido que dan la victoria al no.
El vicepresidente, Álvaro García Linera, sostuvo en La Paz que los resultados preliminares de las firmas Ipsos y Mori muestran que el país está "ante un clarísimo empate técnico electoral" que muestra que "la mitad del pueblo boliviano ha optado por que se modifique la Constitución".
"Aún no tenemos los resultados oficiales del Tribunal Supremo Electoral, habrá que esperar horas y días", remarcó, pidiendo a la oposición no realizar "un festejo forzado e innecesario".
El ex ministro de Gobierno, Hugo Moldiz, también enfatizó, en declaraciones recogidas por la Agencia ABI, que se trataba de "un empate técnico" y advirtió que el cómputo oficial de la votación en el área rural, parcialmente considerada por el formato a boca de urna, podría volver el fiel de la balanza, así como el voto en el extrajero.
Las encuestas publicadas las últimas semanas vaticinaban un resultado muy igualado entre ambas opciones. (Foto: EFE)
Oposición celebra el triunfo parcial de "No"
Por su parte, la oposición boliviana celebró el triunfo del No, vaticinado por los sondeos por recuento rápido, en el referendo de este domingo.
El líder de la opositora Unidad Nacional, el empresario Samuel Doria Medina, felicitó "al indómito pueblo boliviano" y aseguró que "se ha sepultado el proyecto de convertir a nuestro país en un proyecto de un solo partido, en convertir a nuestro Estado en autoritario".
Doria Medina pidió a Morales que "reconozca el resultado" y se dedique a trabajar por el país en vez de hacer campaña electoral, mientras que a los demás opositores les dijo que "no es el momento de candidatos ni de división".
"Nadie puede atribuirse esta victoria en particular, esta es la victoria de todas y todos los bolivianos", sostuvo.
Para el ex presidente Jorge Quiroga, quienes votaron por el No dijeron "no a cambiar las reglas para beneficiar a dos personas que quieren seguir en la gestión pública".
Mientras que el gobernador de la próspera región de Santa Cruz, el opositor Rubén Costas, reconoció que "esta es la victoria del pueblo, de los jóvenes, de la ciudadanía" y que el resultado se obtuvo gracias a la "lucha" y a los principios de "todo un pueblo que defiende la libertad y la verdadera justicia".
Las encuestas publicadas las últimas semanas vaticinaban un resultado muy igualado entre ambas opciones, aunque fueron efectuadas antes de que se difundiera una polémica denuncia que implica a Morales en un supuesto caso de tráfico de influencias a favor de una mujer que fue su expareja y que él ha negado.