El gobierno boliviano convocó a dialogar después del 21 de febrero a los camioneros que bloquean varias carreteras desde hace cuatro días, pero dejó en claro que no se aceptará la exigencia del sector de una reforma tributaria.
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, declaró a los medios que invita al sector a dialogar después de esa fecha, cuando se celebrará un referendo sobre un cambio a la Carta Magna que permitirá al presidente Evo Morales ser otra vez candidato a la Jefatura del Estado en 2019.
El llamado al diálogo de parte del gobierno surgió después de que dirigentes de los transportistas expresaran su disposición a suspender el bloqueo si hay un compromiso del presidente Morales para conversar sobre la reforma tributaria que exige ese sector.
La Cámara Boliviana de Transporte Nacional e Internacional pide nuevas reglas para sus afiliados y exige que se les permiten descargar el pago de tributos con facturas de consumo de todo tipo y no solo las que se refieren a su actividad, como actualmente sucede.
Según el Ministerio de Economía, en 2015 las utilidades de los camioneros sumaron 33 millones de dólares, un 15 por ciento más que en 2014.
El presidente de esa asociación, Fidel Baptista, afirmó que los bloqueos se mantienen en los pasos fronterizos de Puerto Suárez a Brasil, en Yacuiba hacia Argentina, en Tambo Quemado a territorio chileno y en Desaguadero a Perú, y en varias vías internas.
El sector del transporte internacional tiene afiliadas a unas 1.200 empresas con 17.000 camiones, según el dirigente Baptista.
No obstante, el presidente Morales declaró hoy ante los medios que los empresarios del sector de transporte "están exagerando, están cometiendo un gran abuso al pueblo (con) el bloqueo y quieren hacer un abuso al Estado no pagando los impuestos".
El gobernante sostuvo que el sector de los transportistas de carga "ha crecido bastante" gracias al desarrollo económico del país y criticó la propuesta de reforma tributaria del sector porque el Estado reduciría sus ingresos en 71 millones de dólares anuales.
"Ahí no vamos a negociar. Si hay diálogo será para informar y explicar cómo algunos dirigentes engañan a los otros transportistas", sostuvo el mandatario que, como condición de diálogo, exigió la previa suspensión de la medida de fuerza.
Consecuencias de la protesta
La protesta está perjudicando a miles de personas paradas en las terminales de buses de las ciudades y en las carreteras, pero también ha tenido efectos en accidentes e incidentes violentos.
El martes, un bus de una empresa de transporte de pasajeros se accidentó en la región andina de Oruro (oeste) al transitar en una ruta precaria debido a que la principal estaba bloqueada.
En el accidente murieron nueve personas y 37 quedaron heridas.
El lunes, un camionero murió en un cuartel cerca de la frontera con Chile tras haber sido golpeado brutalmente por dos militares en estado de ebriedad que lo encontraron en esas instalaciones.
El domingo, una mujer de 63 años murió de un aneurisma en el cerebro tras una discusión con los transportistas que bloqueaban en uno de los accesos a la ciudad de Sucre.