El Gobierno de Bolivia garantizó este lunes que el abastecimiento de combustible se realiza en todo el país, ante el pedido de los transportistas que continúan con sus vehículos en largas filas en las estaciones de servicio en demanda de diésel y gasolina.
El director de la estatal Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán Jiménez, informó que entre el domingo y este lunes se distribuyeron 4 millones de litros de combustible, 1,7 millones de gasolina y 2,3 millones de diésel.
Según el director de la ANH, la sobredemanda se de debe a la especulación de los ciudadanos y no al desabastecimiento de la gasolina. "Los despachos están normales, ayer domingo se despachó una importante cantidad de combustible y desde la madrugada de hoy ya se hizo el despacho", explicó Jiménez.
Las autoridades bolivianas iniciaron el sábado la distribución de diésel para aplacar la escasez del combustible que afectó al país desde hace dos semanas y que, según el Gobierno, se debió a factores climáticos que impidieron el descargue del energético de los buques que llegaron a los puertos de Chile.
A esto se sumó la protesta de varios sectores, como los conductores del transporte pesado que llamaron la semana pasada a un bloqueo de carreteras, en reclamo por la falta del combustible y las filas extensas que se generaron en las estaciones de distribución.
En el centro y en la zona sur de La Paz, los vehículos de transporte público permanecían en las gasolineras. Durante la mañana y parte de la tarde este lunes, el flujo vehicular disminuyó en las principales avenidas y calles de La Paz, ciudad sede de Gobierno.
A la falta de diésel, se suma la escasez de dólares que afronta el país desde marzo del año pasado, algo que coincidió con los informes oficiales que mostraron una disminución de las reservas internacionales netas, que en 2014 llegaron a los 15.122 millones de dólares.
La falta de la divisa ha generado que en los últimos días cada dólar en el mercado paralelo se ofrezca a más de los 12 bolivianos, cuando el tipo de cambio oficial, que se mantiene desde 2011, es de 6,96 bolivianos por dólar.
