El Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, rechazó las acusaciones por parte del Gobierno chileno de actuar "contra la buena fe" en la entrega de la contramemoria a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, por la demanda por las aguas del Río Silala.
A través de un comunicado, la Cancillería altiplánica señaló que actuó "en estricto cumplimiento de los procedimientos y normas de la CIJ y en pleno ejercicio de sus derechos", y que "entregó la contramemora dentro de los plazos establecidos".
"Se rechaza con vehemencia la acusación de que Bolivia habría retrasado la entrega de la contramemoria a Chile, dado que es atribucón exclusiva de dicho tribunal disponer la forma y oportunidad de la entrega de los actuados del proceso", argumentaron.
De esta manera, Bolivia respaldó todas las gestiones realizadas por sus agentes y destacaron que sus acciones se enmarcan "en los procedimientos y normas de dicha Corte".
Cabe señalar que las críticas fueron realizadas por el canciller chileno, Roberto Ampuero, donde, además, aseguró que el presidente Evo Morales aprovechó de contrademandar a Chile con intereses eleccionarios.
El Gobierno boliviano también entregó una nota de protesta al cónsul chileno en La Paz, Manuel Hinojosa, por la suspensión "unilateral" de una reunión del Comité de Fronteras entre ambos países que debía realizarse esta semana.