El presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó este sábado a Chile de una "doble moral" porque desvió las aguas del río Lauca y ahora pide que las autoridades bolivianas no intervengan en el cauce de las aguas de "los manantiales del Silala".
"Doble moral: gobierno de #Chile desde hace más de medio siglo desvió cauce del Río Lauca con graves consecuencias medioambientales y humanas", dijo Morales, quien fue sometido a una cirugía hace pocos días, en su cuenta de Twitter @evoespueblo.
En la misma red social, agregó que Chile ha pedido que Bolivia no intervenga el cauce de los "manantiales del Silala, alterado por ellos mismos hace más de un siglo".
Las aguas del Lauca, que nacen en Chile e ingresaban a territorio boliviano, fueron desviadas en 1962 causando una controversia entre ambos países que provocó la ruptura de las relaciones bilaterales.
Los mensajes del presidente boliviano, Evo Morales, en su cuenta de Twitter. (@evoespubelo)
El gobernante boliviano reaccionó durante esta jornada al anuncio del ministro chileno de Exteriores, Heraldo Muñoz, de que su país pidió a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya bloquear cualquier acción de Bolivia sobre las aguas de la zona del Silala.
"Le hemos pedido a la Corte que no se realicen acciones que puedan afectar cualitativa o cuantitativamente el cauce de este río y se exigirá que Bolivia nos notifique de cualquier acción en este sentido", dijo Muñoz.
El pasado lunes Chile se anticipó a una eventual acción del Gobierno de Morales ante la CIJ y decidió presentar una demanda contra Bolivia para que el tribunal de la ONU determine si el Silala es un río internacional cuyas aguas deben compartir ambos países.
En respuesta, Morales dijo que su país presentará "una contrademanda" por lo que considera un robo y utilización abusiva del recurso hídrico de parte de Chile.
Bolivia sostiene que el Silala es una zona de manantiales o vertientes de aguas subterráneas que fueron canalizadas de forma artificial hace más de cien años al territorio chileno.
En 2009 ambos países estuvieron a punto de llegar a un acuerdo para determinar el uso compartido de las aguas del Silala, pero no se alcanzó un pacto. EFE