Seguidores del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, causaron disturbios este lunes por la noche en los alrededores de una de las sedes de la Policía Federal en el centro de Brasilia y prendieron fuego a varios vehículos. Los manifestantes protestaban por el arresto de un cacique indígena, que fue detenido este lunes por orden judicial, por ser sospechoso de apoyar los actos antidemocráticos que piden un golpe de Estado contra el mandatario electo, Luiz Inácio Lula da Silva, quien asumirá el poder el próximo 1 de enero. Los disturbios tuvieron lugar cerca del hotel donde se hospeda el futuro jefe de Estado. La Policía Militarizada utilizó gases lacrimógenos y balas de goma para tratar de dispersar a los vándalos y montó un cerco de seguridad en torno al hotel después de que se desataran los incidentes.