El gobernador del estado de Río de Janeiro, Wilson Witzel, acusó de persecución política al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tras haber sido acusado por supuestas irregularidades en la gestión de fondos públicos para combatir la pandemia del coronavirus.
La residencia de Witzel fue allanada este martes por la Policía Federal, que investiga una red de corrupción en el montaje de hospitales de campaña que involucra a funcionarios de la administración del sistema público de salud de Río de Janeiro.
Witzel negó su participación en alguna red de corrupción y acusó a Bolsonaro de esta tras el operativo que llevó a cabo los allanamientos.
"Los allanamientos, además de ser innecesarios, no resultaron en nada, no fueron encontrado valores, joyas; se encontró apenas la tristeza de un hombre y de una mujer por la violencia y ese hábito de persecución política que está iniciando en nuestro país", indicó Witzel.
El gobernador agregó que "lo que pasó conmigo va a pasar con otros gobernadores considerados enemigos" y atribuyó el hecho a la supuesta interferencia política que hizo el presidente brasileño en la Policía Federal.
En las últimas semanas Bolsonaro ha evidenciado las profundas diferencias que mantiene con distintos gobernadores regionales.
Además, la Policía registró el Palacio de Guanabara, sede de Gobierno, y otros inmuebles de propiedad de Witzel, como la residencia donde vivía antes de ser elegido gobernador y la oficina de abogados de su esposa, Helena Witzel.