Un ataque a tiros al campamento instalado a favor de Luiz Inácio Lula da Silva en Curitiba, donde el ex presidente brasileño está preso desde el pasado 7 de abril, dejó este sábado dos heridos, uno de ellos de gravedad, y elevó la tensión entre una militancia dispuesta a resistir hasta el final.
El incidente ocurrió en la madrugada de este sábado, cuando un individuo efectuó disparos de arma de fuego en dirección al campamento, situado a un kilómetro de distancia de la sede de la Policía Federal en Curitiba, en el sur del país, donde Lula cumple una pena de prisión de 12 años y 1 mes por corrupción.
Un simpatizante, identificado como Jeferson Lima de Menezes, de cerca de 40 años y procedente de Sao Paulo, fue herido con un disparo "en el cuello" y su estado de salud es grave e "inestable", según confirmaron a Efe fuentes de la Secretaria de Salud del estado de Paraná.
Otro tiro impactó en uno de los baños químicos instalados en el campamento, donde duermen diariamente unos 300 seguidores de Lula, y fragmentos de bala hirieron levemente a una mujer en el hombro, de acuerdo con un comunicado de la Secretaría regional de Seguridad.
La Policía ha abierto una investigación y, hasta el momento, peritos han recogido en el lugar de los hechos casquillos de bala de una pistola 9 milímetros.
Desde que Lula ingresó en prisión, decenas de simpatizantes llegados de diferentes partes de Brasil acampan en una vigilia permanente con la perspectiva de permanecer allí hasta que vean en libertad a su líder, que encabeza todos los sondeos de opinión de cara a las elecciones del próximo octubre.
La presidente del Partido de los Trabajadores (PT), la senadora Gleisi Hoffmann, condenó el ataque de, según dijo, "más de 20 tiros" y apuntó como sus responsables a aquellos que "incitan el odio" en sus discursos contra "los movimientos sociales de izquierda".
La Alcaldía de la capital paranaense y la Policía Federal ya solicitaron hace algunos días el traslado de Lula a otra unidad más "segura y adecuada", en vistas de las protestas tanto a favor como en contra de Lula.
Para el próximo 1 de mayo, con motivo del Día Internacional de los Trabajadores, las principales centrales sindicales han convocado manifestaciones en Curitiba para mostrar su apoyo a Lula y pedir su libertad, entre otras reivindicaciones.