La encuesta proyectó varios escenarios electorales debido a que la mayoría de partidos todavía no definieron su candidato.
En el caso de que Lula sea el aspirante del Partido de los Trabajadores (PT), el ex presidente ganaría las elecciones en todas las hipótesis planteadas.
En todos los escenarios posibles, las elecciones llegarán a una segunda vuelta.
El ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva lidera las intenciones de voto para los comicios presidenciales de 2018, según un sondeo divulgado hoy por la firma Datafolha.
La encuesta proyectó varios escenarios electorales debido a que la mayoría de partidos todavía no definieron su candidato para los comicios del año que viene.
En todos ellos, se debería ir a una segunda vuelta debido a que ningún aspirante logra la mayoría suficiente para ganar los comicios en la primera vuelta.
En el caso de que Lula sea el aspirante del Partido de los Trabajadores (PT), el ex presidente ganaría las elecciones en todas las hipótesis planteadas.
Si el aspirante del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) es Geraldo Alckmin, actual gobernador de Sao Paulo, Lula lograría el 30 por ciento de los votos, superando al ultraderechista Jair Bolsonaro (del Partido Social Cristiano), que lograría el 16 por ciento de los sufragios.
La líder ecologista Marina Silva, del partido Rede, obtendría el 15 por ciento de los votos y Alckmin el ocho por ciento.
Si el aspirante del PSDB es Joao Doria, actual alcalde de Sao Paulo, la mayor ciudad del país, Lula obtendría el mismo 30 por ciento de los votos, seguido de Bolsonaro y Marina Silva, ambos con el 15 por ciento, y Doria lograría el 10 por ciento.
Datafolha también divulgó que si el juez federal Sergio Moro, responsable del gigantesco caso de corrupción en Petrobras, se presentara a las elecciones, sería el segundo candidato más votado, con el 14 por ciento de los sufragios, apenas superado por Lula, que lograría el 29 por ciento.
Rechazo a Lula
Otro escenario planteado son unas elecciones sin ningún candidato salpicado por la corrupción del alrededor de Petrobras. En este caso, Marina Silva sería la candidata más votada (27 por ciento), seguida de Bolsonaro (18 por ciento) y Doria (14 por ciento).
Pese a liderar las intenciones de voto, Lula también es el candidato que tiene un mayor rechazo por parte de los ciudadanos en el primer turno, con un 46 por ciento, seguido de Alckmin (34 por ciento) y Bolsonaro 30 por ciento).
En el caso de producirse una segunda vuelta, Lula ganaría ante Alckmin y Doria, obteniendo en ambos casos el 45 por ciento de los votos, por el 32 por ciento de Alckmin y el 34 por ciento de Doria.
Si su rival fuera Marina Silva, los dos obtendrían el 40 por ciento de los sufragios, y perdería si el otro aspirante fuera el juez Moro (44 por ciento contra el 42 por ciento del ex presidente). Ya ante Bolsonaro, Lula ganaría cómodamente por 45 por ciento a 32 por ciento.
Datafolha entrevistó a 2.771 personas entre el 21 y el 23 de abril y el sondeo tiene un margen de error de dos puntos.
Lula, presidente de Brasil entre 2003 y 2010, no ha oficializado sus aspiraciones a la Presidencia, pero tampoco oculta su deseo de volver al poder, y su Partido de los Trabajadores, que fundó en 1980, ya ha declarado que lo tiene como "única opción" para las elecciones de octubre del año próximo.
El exmandatario tiene cinco causas abiertas por corrupción y obstrucción a la Justicia alrededor del caso Petrobras y según las normas electorales del país, puede ser candidato a la presidencia aún si fuera condenado en primera instancia, pero quedaría inhabilitado si alguna sentencia fuera confirmada por un tribunal superior.
