Según informó la Policía, hubo un fuerte intercambio con los delincuentes.
Sin embargo, ningún agente resultó herido.
Los sospechosos entraron en una casa y tomaron a una familia como rehén.
Al menos 11 personas murieron durante un supuesto tiroteo entre policías y ladrones tras un intento de robo en dos sucursales bancarias en la ciudad brasileña de Guararema, en la región metropolitana de Sao Paulo.
Las 11 víctimas fatales eran sospechosas de robo y perdieron la vida durante un tiroteo con los agentes policiales, que no resultaron heridos, según confirmó la Policía Militar.
El hecho se registró cuando cerca de 30 asaltantes armados con fusiles y pistolas participaron de un asalto a las sucursales del Banco do Brasil y Santander Brasil en la ciudad de Guararema, ubicada en el estado de Sao Paulo.
Los delincuentes hicieron explotar los cajeros electrónicos de una de las agencias, pero la llegada de la policía frustró el robo.
"Lo primero que ocurrió fue el intercambio de tiros con los policías territoriales de la región, que pidieron refuerzo. La Rota (el batallón de operaciones especiales de la Policía Militarizada de Sao Paulo) bloqueó las vías para que no consiguieran escapar", explicó el comandante Mario Alves da Silva, en declaraciones a Globo.
Durante la fuga, los sospechosos entraron en una casa y tomaron a una familia como rehén, aunque posteriormente los liberaron, según primeras informaciones de la Policía Militar.
De acuerdo con las autoridades, los sospechosos ya estaban siendo controlados por el Grupo de Combate al Crimen Organizado (Gaeco), vinculado al Ministerio Público, y se sabía que estaba planeando un ataque en la región.
"No sabíamos el lugar exacto en el que realizaría el ataque, por eso reforzamos la seguridad en esas dos ciudades", agregó Silva.
