Al menos 30 personas han muerto y otras 400 se encuentran heridas como resultado de un terremoto de 7 grados e Richter que sacudió este viernes la provincia central china de Sichuan, la misma en la que un sismo de un grado más de magnitud causó 90.000 muertos hace casi cinco años.
El sismo, situado a 13 kilómetros de profundidad, se produjo a las 8:02 hora local (0:02 AM) y sacudió la comarca de Lushan, en el área municipal de Yaan, situada en el centro de la provincia, a los pies del límite oriental de la meseta tibetana, según los primeros datos del Centro de Redes Sismológicas de China.
El epicentro se situó a 30,3 grados latitud norte y 103 grados longitud este, detalló el centro, citado por la agencia oficial Xinhua.
Más de 2.000 soldados del Ejército de Liberación Popular chino han sido enviados a la zona afectada para participar en las tareas de rescate y ayuda a las víctimas, informó la división militar de Chengdu, la capital provincial de Sichuan.
La fuerza del sismo
El fuerte temblor pudo sentirse claramente en la capital provincial, Chengdu, situada a 140 kilómetros de Yaan, así como en otras provincias del oeste del país, en un radio de miles de kilómetros.
Un residente de Chengdu relató a Xinhua que desde su apartamento, situado en un decimotercer piso, pudo sentir cómo su vivienda temblaba durante 20 segundos, mientras veía caer tejas de edificios colindantes.
La televisión estatal CCTV ha ofrecido las primeras imágenes de la zona afectada, en la que la mayoría de los habitantes han salido de sus casas y permanecen en la calle por temor a réplicas.
Tras el fuerte tembor inicial se han registrado varias réplicas en la zona, de entre 4 y 5 grados.
El oeste de China es una zona de frecuente actividad sismológica, al encontrarse en la zona de fricción de las placas tectónicas india y asiática. En las últimas semanas varios temblores de menor intensidad en la también occidental provincia china de Yunnan han causado decenas de heridos.
El 12 de mayo de 2008, un seísmo de 8 grados con epicentro en Weichuan (norte de Sichuan) causó 90.000 muertos y cerca de 375.000 heridos, siendo el peor sufrido por China desde el terremoto de Tangshan en 1976.