China aprobó este viernes una nueva ley sobre protección de la privacidad que exigirá "consentimiento individual" cuando se procese "información personal sensible" y que busca evitar discriminaciones de precios en función de los macrodatos almacenados de los clientes.
La legislación, que entrará en vigencia el 1 de noviembre, exige que los usuarios puedan rechazar que las empresas recopilen sus datos para elaborar perfiles, recoge la agencia estatal Xinhua.
La agencia agrega que la legislación, aprobada hoy por el Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional (Legislativo), exigirá la suspensión o cancelación de aplicaciones que procesen "ilegalmente" datos personales "sensibles", entre ellos, aquellos relacionados "con biométrica, medicina y salud, cuentas financieras, y localización".
Previamente, uno de los voceros de la ANP, Zang Tiewei, había adelantado que la legislación quiere evitar discriminaciones derivadas del uso de los datos, tales como -por ejemplo- ofrecer precios diferentes por el mismo servicio según el historial de compras de cada usuario.
Zeng aseguró el pasado abril que "la recopilación excesiva de información personal" se había convertido en "un problema apremiante" y que era necesario "mejorar el manejo de la información personal".
En marzo de 2020, China tenía 900 millones de usuarios de internet, más de 4 millones de sitios web y más de 3 millones de aplicaciones, según una introducción del proyecto de ley.
La ley sigue al escrutinio al que el Gobierno chino está sometiendo a las grandes tecnológicas del país, el cual también ha afectado a compañías de transporte, sector educativo, videojuegos y, sobre todo, al tecnofinanciero.