El primer ministro chino, Li Keqiang, abogó este domingo por finalizar este año las negociaciones de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP), un megatratado de libre comercio que excluye a Estados Unidos.
Así lo expresó Li antes del inicio de la reunión bilateral entre China y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en el marco de la cumbre que se celebra hasta el lunes al norte de Bangkok, con la ausencia destacada del presidente de EEUU, Donald Trump.
El primer ministro chino destacó las "altas expectativas" en relación con el RCEP, que aunaría a cerca de un tercio del PIB y de la mitad de la población mundiales, con la esperanza de que pueda firmarse el año que viene.
China es el principal impulsor del RCEP, que también incluye a Australia, Corea del Sur, Japón, India, Nueva Zelanda y los diez miembros de la ASEAN, formada por Birmania (Myanmar), Brunéi, Camboya, Filipinas, Indonesia, Laos, Malasia, Singapur, Tailandia y Vietnam.
La víspera, el ministro de Comercio filipino, Ramón Lopez, dijo que el RCEP contaba con el consenso de todos los países menos uno, que fuentes cercanas a las negociaciones indicaron a Efe que se trataba de India.
Antes de la reunión bilateral ASEAN-India, el primer ministro indio, Narendra Modi, apostó por el aumento de la conectividad y la relación comercial entre su país y la región del Sudeste Asiático, pero no hizo mención al RCEP.
El RCEP nació como la respuesta de Pekín al Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), amparado en un principio por Washington pero del que Trump sacó a su país poco después de ocupar el Despacho Oval en 2017.
La ausencia del presidente estadounidense en la capital tailandesa ha dado el protagonismo de esta reunión a China, representada como es habitual por su primer ministro, que está afianzando la influencia china en la región.
En su lugar, Trump ha enviado una delegación comandada por el Secretario de Comercio, Wilbur Ross, y el Asistente del Presidente en Temas de Seguridad Nacional, Robert O'Brien.
Hasta el momento, no hay programada una reunión bilateral entre los representantes de Washington y Pekín, envueltos en una guerra comercial que ha afectado negativamente a la economía global, aunque ambos coincidirán en el Foro de Asia Oriental, que tendrá lugar el lunes.