Situación obligó a cerrar un centenar autopistas y cancelar vuelos.
La contaminación ambiental continúa siendo un problema sin resolver para el gigante asiático.
China activó la alerta naranja ante los graves niveles de contaminación que se registran en el norte, el centro y el este del país, y que han obligado a cerrar autopistas y cancelar o retrasar vuelos hoy.
El Centro Meteorológico chino tomó la determinación de pasar desde la alerta amarilla a la naranja en zonas como la costa oriental del país, como en Jiangsu, Zhejiang, Anhui o la metrópolis de Shanghai; en el centro, en Henan, y el norte, en Beijing.
A pesar de la alerta, el centro anunció que la situación mejorará a partir con miras al día miércoles, gracias a la llegada de un frente frío que vendrá acompañado de fuertes vientos, lo que ayudará a limpiar el aire aunque conllevará un descenso de temperaturas.
La extrema contaminación provocó el cierre temporal de un centenar de autopistas en el este del país, y diversas cancelaciones o retrasos de vuelos en los aeropuertos de la ciudad costera de Qingtao y Jinan, ambas en la provincia oriental de Shandong.
La contaminación es una de las graves consecuencias del rápido desarrollo de China, y uno de las preocupaciones más importantes para su población, calculándose que casi el 40 por ciento de las 113 ciudades más grandes del país oriental sufre niveles de contaminación superiores incluso a los laxos límites oficiales que marcan las leyes medioambientales del gigante asiático.
