Cuatro operarios de una central nuclear en Yangjiang, al sur de China, fueron sancionados por ocultar un problema técnico que causó la detención del sistema de refrigeración de uno de los principales reactores, admitió el Ministerio de Medio Ambiente chino más de un año después de que ocurriera el suceso.
Según informa hoy jueves el diario South China Morning Post, las acciones de los operarios provocaron que un sistema de bombeo de calor residual dejara de funcionar durante seis minutos, pero no reportaron la incidencia en el registro de la central, como era su obligación.
El Ministerio no informó de si el suceso, ocurrido el 22 de marzo de 2015, produjo una fuga de radiación o supuso una amenaza a la seguridad en la zona, situada en la provincia de Cantón, a unos 200 kilómetros al oeste de Hong Kong.
Las autoridades medioambientales dictaron sanciones administrativas contra los operarios el 26 de julio, aunque no informaron de estos castigos hasta el pasado martes 2 de agosto, y los medios chinos no se hicieron eco de ellos hasta hoy.
La central de Yangjiang se inauguró en marzo de 2014 y fue el primer proyecto atómico puesto en marcha en China después del parón de tres años que ordenaron las autoridades tras el accidente nuclear en Fukushima, el 11 de marzo de 2011.