El Banco Popular de China realizó este miércoles una nueva inyección de liquidez en el sistema bancario del país, en este caso de 140 mil millones de yuanes, un día después de llevar a cabo otra inyección de 150 mil millones de yuanes.
La operación equivale a 21.800 millones de dólares, después de que la de este martes ascendiese a unos 23.400 millones de dólares.
El banco central chino explicó en su página de Internet que esta última inyección se realizó a través de préstamos a corto plazo con vencimiento a seis días y un interés del 2,3 por ciento.
Normalmente, las inyecciones de liquidez del Banco Popular suelen realizarse a través de acuerdos de recompra inversa, por los que se venden valores condicionados a un compromiso para recomprarlos posteriormente.
La última vez en que el banco central realizó una inyección a través de préstamos a corto plazo fue en enero pasado.
El emisor chino ha realizado en los últimos meses numerosas inyecciones de liquidez para garantizar la estabilidad del sistema financiero del país, en un período de turbulencias por la crisis de la bolsa, primero, y después por las devaluaciones del yuan de la semana pasada.
El pasado 25 de junio el banco central rompió más de dos meses de sequía e inició una serie de inyecciones para asegurar que hubiera liquidez disponible.