Las exportaciones cayeron 0,5 por ciento respecto al año anterior afectado por una débil demanda y el cierre de las fábricas durante el Año Nuevo Lunar.
Las importaciones cayeron un 15,3 por ciento, resultando en un superávit comercial de US$27.300 millones, el punto más alto en seis meses.
La caída de las importaciones llega a China en un momento en que ha estado tratando de impulsar la demanda interna en un intento por compensar la desaceleración de las exportaciones.
|
Durante el Año Nuevo chino la economía del país sufrió una importante desaceleración. |
"Especial atención"
Los analistas aseguraron que aunque el cierre de los establecimientos durante el Año Nuevo chino afectó los números, la disminución no puede atribuirse sólo a la fiesta.
Dijeron que la caída -más grande de lo que se esperaba, especialmente en las importaciones- es preocupante ya que da una idea de la desaceleración del crecimiento.
"El colapso de las importaciones requiere una atención especial", dijo Ren Xianfeng, de IHS Global en Pekín.
"Una caída de más del 15 por ciento en enero, no puede ser explicada totalmente por el calendario lunar y a eso se le suma la opinión de que la producción económica es más lenta que lo que los indicadores principales pueden sugerir".
A principios de este mes, la Federación China de Logística y Compras informó que el índice de importaciones de enero cayó a 46,9 de 49,3 del mes anterior, mostrando desaceleración en la demanda en el país.
A pesar de estas cifras, los analistas dijeron que es probable que la caída sea de corta duración y las importaciones pueden empezar a subir en los próximos meses.
"El mayor riesgo"
El sector exportador ha sido clave para el crecimiento económico de China en los últimos años ya que las empresas globales se han volcado sobre Pekín para tomar ventaja de sus bajos costos de fabricación.
Sin embargo, la desaceleración en EE.UU. y en la eurozona, que son dos de los mayores mercados para los productos chinos, ha ocasionado una reducción en el ritmo de crecimiento de los envíos en los últimos meses.
La crisis de la deuda de la eurozona y la alta tasa de desempleo en EE.UU. han afectado la confianza del consumidor y dañado la demanda de productos chinos.
Las cifras oficiales del viernes mostraron que el comercio bilateral entre China y la Unión Europea cayó más del 7 por ciento en enero.
Los analistas dijeron que los continuos problemas de deuda en la zona del euro eran la mayor amenaza para el crecimiento de China.
"Creemos que el gran lastre y el mayor riesgo para el crecimiento de China en 2012 es la menor demanda externa causada por la crisis de la deuda en curso en la eurozona", dijo Ting Lu de Bank of America Merrill Lynch en Hong Kong.
"Nuestros economistas europeos esperan una recesión moderada en la zona euro de -0,6 por ciento en 2012, mientras que nadie sabe la probabilidad exacta y la gravedad de un colapso de la zona euro".
¿Más presión?
El superávit comercial de China ha sido un tema políticamente sensible, especialmente con los socios comerciales, como EE.UU..
Las empresas y los políticos han acusado a China de mantener el valor de su moneda artificialmente bajo, en un intento por impulsar sus ventas en el extranjero.
Ellos argumentan que el elevado superávit comercial de China ha ido en detrimento de su crecimiento económico.
Los últimos datos llegan poco antes de la visita del viceprimer ministro chino Li Keqiang a EE.UU., programada para la próxima semana.
Los analistas dijeron que el reciente incremento en el superávit podría ocasionar una presión adicional sobre China, durante la visita del viceprimer ministro, que modifique su política de crecimiento de exportaciones.