La población de China creció un 5,38 por ciento en los últimos diez años hasta alcanzar los 1.411 millones de habitantes, según el censo de 2020, el primero desde 2010, cuyos resultados anunció hoy la Oficina Nacional de Estadística del gigante asiático.
El número total de habitantes, de acuerdo con este último recuento, es de 1.411.718.000 habitantes, frente a los 1.339.724.852 contabilizados en el censo de 2010.
La cifra no incluye a los residentes de Hong Kong, Macao y Taiwan, ni a los extranjeros que viven en las 31 provincias, regiones autónomas y municipalidades de la parte continental, según precisó la agencia estatal Xinhua.
En cuanto al crecimiento anual, el censo de 2020 refleja una media del 0,53 por ciento de aumento en la última década frente al 0,57 por ciento del período 2000-2010 y el 1,07 por ciento entre 1990 y 2000.
Nada comparado en cualquier caso con la época de finales de los setenta y principios de los ochenta, cuando la población de China crecía a una media anual del 2,1 por ciento.
CRECIMIENTO MÁS LENTO EN UNA POBLACIÓN QUE ENVEJECE
La población continúa creciendo, pero sigue envejeciéndose, lo que hace pensar que en los próximos años, si no ya en 2022, su imparable crecimiento desde hace cincuenta años se revertirá.
Los datos del censo de 2020 muestran que crece más lentamente que en el pasado: desde 2000 a 2010 había aumentado un 5,84 por ciento frente al 5,38 por ciento de esta última década y el 11,6 por ciento de la anterior.
Asimismo, el grado de crecimiento por grupos de edad refleja que las personas disponibles como fuerza laboral continúan disminuyendo.
Los habitantes de menos de 14 años continuaron creciendo y representan ahora el 17,95 por ciento del total, aunque sólo un 1,35 por ciento por encima de lo que suponían en 2010.
Los ciudadanos de entre 15 y 59 años se sitúan en 894 millones, un 6,79 por ciento menos que hace diez años, cuando ya se habían reducido en un 6,29 por ciento respecto al censo de 2000.
Los mayores de 60 años son ahora 264 millones frente a los 177,6 millones de 2010, mientras que los mayores de 65 crecieron hasta los 190 millones, frente a los 118,8 millones que se contabilizaron hace diez años.
Los datos sobre población adulta e infantil son fundamentales para determinar las políticas de jubilación y de natalidad del Gobierno chino, que todavía mantiene la prohibición de tener más de dos hijos por pareja, límite que probablemente se suprimirá pronto.
El censo refleja una media de 2,6 habitantes por unidad familiar en China frente al 3,1 de 2010, una tasa que se reduce, según la Oficina Nacional de Estadística, debido a la "creciente movilidad" de la población.
Más de 7 millones de personas trabajaron en la recogida de datos para elaborar el censo de 2020, que empleó por primera vez avanzados métodos telemáticos y tecnologías digitales para la recogida de las variables demográficas.