Dos secuestradores tomaron rehén en el este de China a una niña de 11 años para pedir un rescate a su familia. Pero cuando se enteraron que sus padres eran pobres decidieron liberarla y darle 500 yuanes (equivalentes unos 42 mil pesos chilenos), informó el diario Shanghái Daily.
El suceso ocurrió en la provincia oriental de Zhejiang, vecina a Shanghái, donde los secuestradores, ocultos con máscaras, raptaron a la niña, la retuvieron contra su voluntad y pidieron a su familia un rescate de un millón de yuanes (84 millones de pesos chilenos).
Cuando la víctima contó las penurias económicas de su familia, y al sospechar que la policía estaba tras ellos, los raptores decidieron liberarla y además darle una pequeña cantidad de dinero.
El suceso ocurrió en marzo pero se conoció recién ahora, luego de que los tribunales condenaran a los dos secuestradores (que fueron detenidos poco después del hecho) a cuatro y cinco años de prisión.
Los dos delincuentes, apellidados Lu y Xie, gastaron 10.000 yuanes (unos 840 mil pesos chilenos) en los preparativos del secuestro, que incluía el arriendo de un automóvil, señaló la información.
Nativos de la provincia de Fujian, también en la parte oriental de China, Lu y Xue intentaron el secuestro para pagar unas deudas que habían contraído en juegos de azar.