El Dalai Lama mostró su "tristeza" por las inmolaciones de monjes budistas
El líder religioso acusó "un genocidio cultural" por parte de China.
"Algunos miembros de la línea dura del Gobierno me ven como un demonio", señaló.
El líder religioso acusó "un genocidio cultural" por parte de China.
"Algunos miembros de la línea dura del Gobierno me ven como un demonio", señaló.
El Dalai Lama expresó en Tokio su tristeza por la ola de inmolaciones de monjes budistas este año y criticó la política de "genocidio cultural" que promueve en Tíbet la "línea dura" del Gobierno chino.
En una rueda de prensa, el Dalai Lama subrayó que los tibetanos están "totalmente comprometidos" con el principio de la no violencia y recordó que el Tíbet no busca la independencia sino que Beijing le conceda una "autonomía significativa".
Sin embargo, consideró que en la región se está produciendo un "genocidio cultural" y ello se ha reflejado en "incidentes tristes" como las inmolaciones que se han registrado este año de 11 monjes, de los cuales seis fallecieron.
La última ocurrió la semana pasada, cuando una monja murió en la provincia china de Sichuan tras quemarse a lo bonzo en honor al Dalai Lama y pidiendo la libertad para el Tíbet.
El líder espiritual tibetano arremetió contra la "monstruosa hipocresía" de la "propaganda comunista" china que, en su opinión, es "inmoral y distorsiona la realidad".
"La fuente de todos los problemas es la ignorancia, los chinos tienen derecho a conocer la verdad" para poder juzgar, añadió, tras instar a los periodistas a "no permanecer indiferentes" y promover los valores humanos en su labor de "educar a la gente".
"Algunos miembros de la línea dura del Gobierno me ven como un demonio. ¿Quién se cree eso? Es estúpido. Nadie cree lo que dicen", señaló.