Otro monje tibetano se sumó a oleada de inmolaciones en China
Losang Gyatso, de 18 años, se quemó a lo bonzo en la prefectura de Aba.
El acto se suma a una veintena de casos registrados en los últimos meses.
Losang Gyatso, de 18 años, se quemó a lo bonzo en la prefectura de Aba.
El acto se suma a una veintena de casos registrados en los últimos meses.
Un monje budista tibetano de 18 años intentó suicidarse quemándose a lo bonzo en la prefectura de Aba, en el oeste de China, dos días después de que una monja falleciera en el mismo lugar en otra inmolación, informaron este martes la prensa oficial china y grupos pro independencia en el Tíbet.
El nuevo caso, último de más de una veintena de inmolaciones de monjes tibetanos en el oeste de China, se produjo en la tarde de ayer, lunes, cuando el monje Losang Gyatso, del monasterio de Kirti, se intentó suicidar en una céntrica calle de la localidad de Qiatang, según la agencia oficial Xinhua.
Un comunicado de la ONG International Campaign for Tibet añadió que dos tibetanos que intentaron ayudar al monje fueron golpeados por la policía.
A más de 60 años de su invasión, el Tíbet sigue reclamando la independencia perdida a manos de Pekín. (Foto: EFE) |
Desde el año pasado se ha producido una oleada de inmolaciones de monjes tibetanos en el oeste de China, especialmente en Aba, situada en la provincia de Sichuan, una zona de transición entre las áreas de población tibetana y las zonas habitadas por la etnia han, la mayoritaria en el país.
Muchos de los suicidas eran monjes de Kirti, uno de los monasterios más sagrados de la región y donde desde el año pasado hay fuertes tensiones entre los acólitos y las autoridades, que han llegado a sitiar el recinto para que nadie saliera de él o han enviado a los bonzos a campos de concentración, según grupos de derechos humanos.
China asegura que el Tíbet es desde hace siglos parte inseparable de su territorio, mientras que los tibetanos argumentan que la región fue durante mucho tiempo virtualmente independientemente, hasta que fue ocupada por las tropas comunistas en 1951, si bien Pekín considera ese hecho una "liberación" de la antigua "teocracia".