El menor de 22 meses fue abusado y maltratado hasta la muerte por la pareja de su mamá.
El juez que leía los detalles de lo ocurrido tampoco pudo evitar las lágrimas.
"Fue el caso más duro de mi carrera". De esa forma definió el defensor público Javier Baquero lo que ocurrió durante una audiencia en la que terminó llorando cuando el juez contó los macabros detalles de lo que su defendido le hizo a una guagua en Bogotá, Colombia.
Óscar Orjuela Pinzón, de 19 años, estaba acusado de abusar, maltratar y asesinar al hijo de una mujer con la que pololeaba hace cuatro meses. La víctima era un niño de menos de dos años.
"Pensé en mis hijos y en el dolor que habrá sentido ese niño", dijo Baquero a El Tiempo sobre el momento en que no pudo evitar las lágrimas.
El propio juez, que leía las evidencias, lloró y dijo que no podía seguir dando detalles, pues las 44 pruebas de golpes, mordidas y quemaduras eran demasiado morbosas.
Orjuela Pinzón fue enviado a prisión preventiva en la cárcel La Modelo de Bogotá.
