Piedad Córdoba se reunirá con representantes del Gobierno para concordar un protocolo de rescate.
La guerrilla anunció que acabará con los secuestros como forma de financiamiento.
La ex senadora liberal Piedad Córdoba dijo que la liberación de los últimos 10 uniformados secuestrados por las FARC podrá darse dentro de un mes, según estimó al término de una reunión con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
"Nosotros creemos que es un mes", calculó Córdoba al recapitular las reuniones que tendrá que sostener el colectivo de mujeres que lidera con el CICR y el Gobierno colombiano la próxima semana para configurar el protocolo de seguridad en el que se desarrollarán los operativos.
Córdoba, que ya ha mediado en la liberación de al menos una quincena de rehenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde 2008, asistió a la reunión con el CICR acompañada de Xiomara Castro, esposa del ex presidente de Honduras Manuel Zelaya, y la nieta del revolucionario mexicano Emiliano Zapata, Margarita Zapata.
También fueron a la reunión Mirta Acuña, una de las fundadoras de la argentina Madres de Plaza de Mayo, y Marleny Orjuela, quien lidera la Asociación Colombiana de Familiares y Miembros de la Fuerza Pública Retenidos y Liberados por Grupos Guerrilleros (Asfamipaz), todas integrantes del grupo internacional de Mujeres por la Paz.
Reuniones con el GobiernoSegún la ex legisladora, el CICR se reunirá este martes con el Gobierno, al tiempo que este grupo de mujeres analizará el borrador del protocolo que este lunes les fue entregado.
Para avanzar en los detalles, Córdoba se reunirá, junto con Orjuela, con el ministro de Defensa colombiano, Juan Carlos Pinzón, el próximo jueves.
"El protocolo puede estar listo la otra semana, mientras lo que se demora Brasil en organizar los helicópteros", que, agregó, podría tomar unos veinte días, de acuerdo a las experiencias anteriores.
A través de un comunicado divulgado en su página web, las FARC se comprometieron el domingo a acabar con el secuestro como fuente de financiación y arma de guerra, y amplió de seis a 10 la cifra de policías y militares secuestrados que se compromete a liberar y que son los últimos uniformados que tiene en su poder.
Los cautivos son los militares Luis Alfonso Beltrán Franco, Luis Arturo Arcia, Robinson Salcedo Guarín y Luis Alfredo Moreno Chagüeza; así como los policías Carlos José Duarte, César Augusto Lasso Monsalve, Jorge Trujillo Solarte, Jorge Humberto Romero, José Libardo Forero y Wilson Rojas Medina.
