Este domingo en la noche y el lunes en la madrugada un grupo de reclusos golpeó a los guardias para poder escapar.
Según la Defensoría Delegada para la Política Criminal y Penitenciaria, el hacinamiento en las URI en Bogotá supera el 200 por ciento.
El sistema carcelario colombiano enfrenta una grave crisis.
El Ministro de Justicia de Colombia, Yesid Reyes, anunció este lunes que se trasladarán más de 500 detenidos a diferentes cárceles de la capital, luego de reconocer el hacinamiento carcelario en los centros de detención provisional de Bogotá.
Esto luego que la noche del domingo y la madrugada del lunes reclusos de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) del barrio Kennedy, la cual alberga 185 personas teniendo una capacidad máxima de 50, golpearan a los guardias para poder salir del establecimiento.
Así mismo en la URI de Tunjuelito, un grupo de presidiarios salto hacia los techos de las casas vecinas para escapar, donde entre los dos centros hubo un total de 25 fugitivos, de los cuales recapturaron a 12.
Reyes confirmó que el fin de semana pasado se realizaron 365 traslados desde las URI a centros carcelarios, y que durante esta semana días se aspira a mover 150 personas más.
La situación de hacinamiento y las advertencias del riesgo de éste han sido denunciadas por diversas entidades anteriormente, como la Defensoría del Pueblo. Según un informe realizado por la Defensoría Delegada para la Política Criminal y Penitenciaria, el hacinamiento en las URI en Bogotá supera el 200 por ciento.
El sindicato del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) iniciará una huelga para no aceptar más detenidos en las cárceles debido al alto porcentaje de hacinamiento. En agosto, la organización sindical realizó una "operación reglamento", donde no admitían más detenidos como forma de presión al Gobierno para que solucionara la situación.
