Cuba tendrá apagones durante todo el día de Navidad que, en el horario de mayor demanda de energía, llegarán a dejar sin corriente a un 60% del país, informó este jueves la estatal Unión Eléctrica (UNE).
Se trata de una de las mayores tasas registradas, según datos cotejados por la agencia de noticias EFE: similar a la de la víspera y cerca de la mayor documentada hasta la fecha, del 62%, de principios de diciembre.
Todo ello refleja la grave crisis energética que sufre la isla desde mediados de 2024, debido a las frecuentes averías en sus obsoletas centrales termoeléctricas y la falta de divisas para importar el petróleo necesario a fin de producir energía.
La UNE, adscrita al Ministerio cubano de Energía y Minas, calcula para el horario "pico" de la jornada, en la tarde-noche, una capacidad de generación de 1.365 megavatios (MW) y una demanda máxima de 3.300 MW.
El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 1.935 MW y la afectación estimada -lo que se desconectará realmente para evitar apagones desordenados- alcanzará los 1.965 MW.
La mitad de las termoeléctricas cubanas no funcionan
Actualmente, ocho de las 16 unidades de producción termoeléctrica operativas están fuera de servicio por averías o mantenimientos. Esta fuente de energía aporta en torno al 40% del mix energético en Cuba.
Asimismo, 62 centrales de generación distribuida (motores) y la infraestructura de motores de Moa (este) no están operando por falta de combustible (diésel y fueloil). Además, una docena de motores están parados por falta de lubricante. Esta fuente de energía supone también un 40 % del mix energético.
Expertos independientes señalan que la crisis energética en Cuba responde a una infrafinanciación crónica de este sector, completamente en manos del Estado desde el triunfo de la revolución en 1959.
Por su parte, el Gobierno cubano señala al impacto de las sanciones estadounidenses a esta industria y acusa a Washington de "asfixia energética".
Los prolongados apagones diarios lastran la economía, que se ha contraído un 11% en los pasados cinco años y este ejercicio cerrará también en negativo. También han sido el detonante de las principales protestas de los últimos cinco años.