La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) denunció este lunes que el régimen cubano ejecutó 905 detenciones de disidentes "pacíficos" por "motivos puramente políticos" durante el pasado mes de abril.
El grupo que lidera el disidente Elizardo Sánchez señaló en su informe mensual sobre represión política en Cuba que esa cifra de detenciones fue "muy alta" aunque "no refleja el creciente nivel de descontento popular" en el país.
Este grupo denuncia también que en abril se produjeron 90 casos de disidentes agredidos físicamente por agentes policiales o parapoliciales, mientras que 104 que fueron hostigados con los denominados "actos de repudio" y otras formas de acoso.
Entre esos casos cita particularmente la doble detención de Ángel Moya, ex prisionero del "Grupo de los 75" excarcelado con una licencia extrapenal, y denuncia que este disidente -esposo de la líder de las "Damas de Blanco", Berta Soler- fue "brutalmente golpeado por oficiales de la Policía".
La CCDHRN se queja, además, de que hasta la fecha el Gobierno "no acepta la cooperación sin reservas" de la Cruz Roja Internacional ni de otras ONG internacionales en materia de Derechos Humanos, y de que no ha invitado a representantes de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas a visitar la isla.
El Gobierno cubano considera a los disidentes "contrarrevolucionarios" y "mercenarios" al servicio de Estados Unidos.