Cuatro decenas de niños fueron rescatados desde ruinas de escuela paquistaní
Mientras socorristas siguen buscando sobrevivientes del terremoto del pasado sábado 8 de octubre, varios medios señalan que comenzaron saqueos en varias ciudades del país.
Mientras socorristas siguen buscando sobrevivientes del terremoto del pasado sábado 8 de octubre, varios medios señalan que comenzaron saqueos en varias ciudades del país.
Un total de 40 niños fueron rescatados desde los escombros de una escuela en Balakot, una de las ciudades de Pakistán destruidas por el terremoto del sábado, mientras autoridades informaron de saqueos y pillaje en algunas áreas devastadas.
Según señaló la cadena de televisión GEO TV, tropas paquistaníes y equipos franceses rescataron a 40 niños de las ruinas de una escuela en Balakot, en la provincia de North West Frontier, al tiempo que sacaron 60 cadáveres de escolares.
Los menores se encontraban entre los escombros de la escuela Shaheen, que se desplomó por completo el pasado sábado cuando en su interior había cerca de 400 niños.
En tanto, la ayuda está llegando con cuentagotas al área del norte de Pakistán afectada el movimiento telúrico, lo que está provocando un aumento de las protestas y ya ha causado algunos actos de pillaje, según fuentes citadas por varios medios.
En Muzzaffarabad, capital de la Cachemira paquistaní, comenzó a llegar asistencia debido a que finalmente el pasado lunes se despejó la carretera desde Islamabad, cerrada desde el sábado 8 de octubre.
Diversos medios informaron de que las casas han sido saqueadas y algunos camiones asaltados por la población, que desde el sábado vive a la intemperie, expuesta a los primeros días de frío, a sólo seis semanas del comienzo del invierno.
De las áreas más remotas de Pakistán apenas se saben noticias, aunque se teme que no tengan agua ni electricidad y que, cuando lleguen allí los equipos de rescate, aumenten considerablemente las cifras de víctimas.
El terremoto que el pasado sábado sacudió el Sur de Asia, desde Afganistán a Bangladesh, causó decenas de miles de muertos en Pakistán e India, posiblemente hasta 40.000, según Naciones Unidas, aunque las cifras oficiales se quedan en casi 21.000 víctimas y 47.000 heridos.
Ahora los paquistaníes que se libraron del sismo temen el hambre y el frío en las zonas devastadas al norte del país, sobre todo la zona de Cachemira administrada por Islamabad y North West Frontier.
Organizaciones humanitarias expresaron su preocupación por los cuatro millones de damnificados que se calcula provocó el fenómeno. (EFE)