Correa: el mayor mal para paraguayos es dejarlos "a merced de los golpistas"
Unasur "pudo tomar medidas mucho más drásticas", añadió el mandatario ecuatoriano.
Comparó la destitución de Fernando Lugo con la sublevación policial de su país en 2010.
Unasur "pudo tomar medidas mucho más drásticas", añadió el mandatario ecuatoriano.
Comparó la destitución de Fernando Lugo con la sublevación policial de su país en 2010.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, expresó su contrariedad por las sanciones, leves a su juicio, impuestas a Paraguay en la reunión extraordinaria de la Unasur celebrada en Argentina y dijo que el mayor mal para el pueblo paraguayo es "dejarlo a merced de los golpistas".
Correa dijo que firmó la resolución de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) respecto a la crisis de Paraguay "para no romper la unidad", aunque insistió en que la Unasur "pudo tomar medidas mucho más drásticas".
El mandatario señaló que para él, la destitución en el Congreso del ex presidente paraguayo Fernando Lugo fue un "golpe de Estado" y dijo que ese caso es perfectamente comparable al que vivió el 30 de septiembre de 2010, cuando una sublevación policial amenazó con su permanencia en el poder.
En esa ocasión, recordó Correa, los presidentes de Unasur reunidos en Buenos Aires resolvieron apoyar el orden constitucional en Ecuador y emitieron una resolución de condena a lo que el Gobierno de Quito llamó un "intento de golpe de Estado.
En esa resolución los mandatarios de la región ratificaron que "no tolerarán bajo ningún concepto (...) cualquier nuevo desafío a la autoridad institucional ni intento de golpe al poder civil legítimamente elegido", y advirtieron "de que en caso de nuevos quiebres del orden constitucional adoptarán medidas concretas e inmediatas tales como cierre de fronteras, suspensión del comercio del tráfico aéreo y de provisión de energía y servicios".
Por esa decisión, Correa indicó estar "eternamente agradecido", pero reiteró que "el caso de Ecuador es perfectamente válido para compararlo con el caso del Paraguay".
Además, sobre los argumentos que apuntaban a que sanciones drásticas podrían perjudicar sobre todo al pueblo paraguayo, Correa aceptó que eso pudo pasar "temporalmente", pero que con sanciones más duras se condenaría "perpetuamente a los golpistas"; acotó además que "de ninguna manera la decisión de la Unasur nos satisfizo", pero se aceptó.
"Si no tomamos medidas radicales, estas aventuras antidemocráticas continuarán en Paraguay y en toda nuestra América", alertó y dijo que, en su opinión, con la decisión de separar a Asunción de la Unasur de forma temporal hasta las elecciones del próximo año, "los golpistas paraguayos estarán muy contentos".