La denuncia fue presentada este martes ante una corte del Distrito de Columbia y en ella, según informó la compañía, se acusa al gobierno de haber violado la primera y la quinta enmienda de la Constitución, que defienden el derecho a la libertad de expresión y a no ser considerado culpable sin juicio previo, respectivamente.
Además del presidente, CNN ha incluido en su denuncia al jefe de Gabinete, John Kelly; a la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders; al jefe adjunto de comunicación, Bill Shine; al director del Servicio Secreto, Joseph Clancy, y a un agente del mismo, identificado inicialmente con el pseudónimo John Doe (anónimo o desconocido).
Después de dicha comparecencia, en la que Trump llamó a Acosta "maleducado y una persona terrible", un agente de los servicios secretos le reclamó al corresponsal su acreditación a la salida de la residencia presidencial, según se pudo ver un video del momento compartido por el periodista en Twitter.
La Casa Blanca justificó su decisión alegando que el periodista le había "puesto la mano encima" a una asesora que intentó arrebatarle el micrófono a instancias del presidente.
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca emitió un comunicado expresando su "firme apoyo" a la acción judicial de la cadena y denunciando que la decisión del gobierno fue "una reacción desproporcionada a los hechos del pasado miércoles".