El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó este miércoles la puesta en marcha de "una gran investigación" sobre el supuesto fraude electoral que se produjo en las elecciones, una afirmación no respaldada hasta ahora por ninguna prueba y que le ha enfrentado con miembros del propio partido Republicano.
"Voy a pedir una gran investigación sobre el fraude electoral, incluyendo a los registrados para votar en dos estados, los ilegales e, incluso, los censados para votar que estaban muertos (y muchos de ellos desde hace tiempo)", dijo Trump en su cuenta de la red social Twitter.
"Dependiendo de los resultados, ¡fortaleceremos nuestros procedimientos de votación!", añadió el magnate en la red social.
En los últimos días, Trump ha afirmado que hubo entre tres y cinco millones de votos ilegales en las elecciones de noviembre que permitieron a la ex candidata demócrata Hillary Clinton ganar el voto popular a pesar de no lograr imponerse en el colegio electoral, que es el sistema que determina quién será el nuevo presidente.
Trump ganó el voto electoral a Clinton por 304 a 232, pero la demócrata logró cerca de tres millones de votos populares más que su rival, algo que los detractores del magnate inmobiliario recuerdan constantemente.
Antes de su victoria, Trump ya había denunciado en múltiples ocasiones que las elecciones estaban amañadas en favor de Clinton.
La construcción del muro
En tanto, el presidente también adelantó que tomará sus primeras medidas en materia de seguridad nacional este miércoles, entre ellas la construcción del muro en la frontera con México.
"Mañana será un gran día para la seguridad nacional. Entre muchas otras cosas, ¡construiremos el muro!", afirmó el magnate a través de su cuenta de Twitter, una vez que los medios locales habían desvelado ya sus planes.
Según medios de comunicación, Trump invitará a la ceremonia a familiares de personas asesinadas por inmigrantes en situación irregular, lo que augura que también podría tomar algún tipo de medida con respecto a las deportaciones de criminales que prometió.
Trump prometió levantar un muro a lo largo de toda la frontera con México y pasar la factura al país latinoamericano, así como deportar a los 11 millones de indocumentados que se estima viven en Estados Unidos.