Cámaras mostraron vehículos sacando personas del camión, por lo que se cree al interior habían mucho más que 38 personas.
Autoridades investigan las causas de las muertes, entre ellas asfixia o un golpe de calor.
Las victimas fatales fallecieron por asfixia y golpes de calor debido a que no funcionaba el aire acondicionado del camión.
A nueve aumentó el número de muertos luego del hallazgo de casi 40 inmigrantes ilegales encerrados en un camion que estaba estacionado en un almacen de San Antonio, Texas, lo que es investigado como un crimen de tráfico de personas que ha provocado indignación en el país norteamericano.
La Policía llegó luego del llamado de uno de los trabajadores del almacén y se encontró con que en la parte de la carga había unas 38 personas, de las cuales ocho estaban ya muertas aparentemente por asfixia o un golpe de calor, pues no funcionaba el aire acondicionado.
Las otras 30 personas fueron llevadas a hospitales de la zona, donde una de ellas murió más tarde. Dos de los fallecidos tenían unos 15 años y el resto de los ocupantes del camión, entre 20 y 30 años, según la policía.
Los termómetros marcaron una máxima de 37,7 grados centígrados a las seis de la tarde de este sábado en San Antonio.
Medios locales de San Antonio indicaron que las cámaras de seguridad del estacionamiento grabaron a varios vehículos que se acercaron al camión y se llevaron a personas, lo que apunta a que hubo más personas que hicieron el viaje dentro del vehículo.
La peor tragedia de este tipo ocurrió en 2003 con la muerte por asfixia de 19 inmigrantes encerrados en un remolque abandonado en Victoria (Texas), entre ellos un bebé. En ese camión iban un total de 55 personas.
Gobierno prometió perseguir y llevar a la Justicia a traficantes de personas
El secretario de Seguridad Nacional de EE.UU, John Kelly, prometió este domingo que el Gobierno estadounidense seguirá trabajando con los de México y los países de Centroamérica para erradicar a los traficantes de personas y llevarlos a la Justicia.
"Esta tragedia demuestra la brutalidad de la red (de tráfico de personas) de la que hablo a menudo. Estos traficantes no tienen consideración por la vida humana y solamente buscan beneficios económicos", dijo Kelly en un comunicado.
"El Departamento de Seguridad Nacional y sus socios en Estados Unidos, México y Centroamérica seguirán erradicando a estos traficantes, llevándolos ante la Justicia y desmantelando sus redes", añadió el funcionario.
En su comunicado, Kelly destacó la labor de los trabajadores de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), que "no solo investigan y ayudan a juzgar incidentes horribles como este, sino que ellos y sus colegas de la Protección de Fronteras y Aduanas (CBP) trabajan duro día y noche, 365 días al año, para prevenir muertes y heridas sin sentido como estas".
"Ellos arriesgan sus vidas para rescatar y salvar las vidas de aquellos que intentan el peligroso viaje hacia el norte mediante las redes de abuso y muerte", agregó Kelly, cuyo Departamento engloba a la ICE y la CBP.
