El gobierno de Estados Unidos consideró "difícil de entender" que Venezuela colabore con Siria a través del envío de combustible, e instó a Hugo Chávez a "trabajar con el resto del mundo para presionar" al régimen de Bachar Al Asad.
En la primera conferencia de prensa en español del Departamento de Estado, el portavoz Mike Hammer respondió a una pregunta sobre el anuncio del ministro venezolano de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, de que su país ha enviado 600.000 barriles de diesel a Siria en el último año y está dispuesto a enviar más.
"Es difícil de entender cómo cualquier país puede apoyar al presidente (sirio) Al Asad en un momento en que la comunidad internacional, con las Naciones Unidas y la Liga Arabe, Estados Unidos y otros países europeos y del mundo estamos intentando presionarle para que pare con esa violencia", indicó Hammer.
Estados Unidos presta "mucha atención" a la cooperación energética y otras ayudas que se puedan proporcionar a Siria, "porque es horrible y trágico cómo está tratando el Gobierno de Al Asad a su pueblo", aseguró el portavoz, que ocupa el cargo de subsecretario de Estado interino para Asuntos Públicos.
"Uno quisiera ver que cualquier país que esté interesado en ver un mejor futuro para el pueblo sirio sin que Al Asad ponga interés en trabajar con el resto del mundo para presionarle", añadió.
El ministro venezolano confirmó la semana pasada que su país envió 600.000 barriles de diesel a Siria en dos cargamentos de 300.000 cada uno, entre fines del año pasado y el año en curso, y afirmó: "si nos vuelven a pedir, les volveremos a dar".