El estado de Nueva York anunció este domingo una serie de medidas para proteger a los inmigrantes y combatir el aumento de los crímenes de odio registrado durante la campaña electoral y tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
"Nunca permitiremos que el miedo y la intolerancia rompan el tejido de lo que somos", dijo el gobernador del estado, el demócrata Andrew Cuomo, agregando que "con estas decididas acciones decimos a la gente de todos los orígenes y creencias: Nueva York es su hogar y refugio, y vamos a hacer todo lo necesario para mantenerlos a salvo".
La iniciativa incluye la creación de un fondo de emergencia público/privado para ofrecer asistencia jurídica a todos los inmigrantes, sin importar su estatus legal.
El fondo, el primero de este tipo en el país, será gestionado por dicho estado y contará con la colaboración de universidades, despachos de abogados y asociaciones que defienden los derechos de los inmigrantes.
Cuomo anunció también la creación de una nueva unidad de la policía estatal especializada en crímenes de odio, que investigará y asistirá a otros cuerpos en casos de este tipo, la que contará con investigadores especializados, algunos de los cuales ya trabajan en supuestos delitos de este tipo sucedidos en los últimos días, como la aparición de esvásticas en distintos puntos del estado.
Aumento de crímenes de odio
Durante esta jornada, políticos locales tenían previsto celebrar un acto para condenar pintadas con esvásticas y a favor de Trump aparecidas en un parque del distrito de Brooklyn esta semana.
Es que, según la Policía de Nueva York, en la ciudad los crímenes de odio han aumentado un 31 por ciento este año con respecto del 2015.
Además, Cuomo comentó que va a impulsar una iniciativa legislativa para que la División Estatal de Derechos Humanos pueda volver a investigar casos de acoso y discriminación en las escuelas públicas, una facultad que perdió en 2012 a raíz de una decisión de la Justicia sobre sus competencias.
Gobernador: "Si deportarán inmigrantes, empiecen por mí"
El gobernador del estado acudió este domingo a una histórica iglesia del barrio de Harlem, un tradicional enclave afroamericano de la ciudad de Nueva York, para ofrecer un discurso llamando a luchar contra la intolerancia.
"El feo discurso político de las elecciones no se terminó con el día de la elección, sino que en ciertas maneras ha empeorado hacia una crisis social que amenaza nuestra identidad como estado y nación y a nuestra gente", manifestó Cuomo, quien evitó mencionar directamente a Trump.
El político demócrata señaló varios casos de acoso contra minorías registrados en distintos puntos del país y recordó que el problema también está afectando a Nueva York.
"Nueva York tiene una responsabilidad especial. Siempre hemos sido la capital progresista de este país", recordó el gobernador, llamando también a combatir "el sexismo, el racismo y la intolerancia" ante cualquier episodio.
Finalmente, Cuomo, de ascendencia italiana, defendió la necesidad de proteger los derechos de los inmigrantes, subrayó que la diversidad "es una ventaja, no una debilidad", y señaló que "si hay un movimiento para deportar inmigrantes, entonces digo que empiecen por mí. Yo soy hijo de inmigrantes".