Se reunirá el viernes con su homólogo polaco, Andrzej Duda, para abordar la respuesta "a la crisis humanitaria y de DDHH que ha creado la guerra injustificada y premeditada de Rusia".
El día previo el mandatario participará en reuniones de la Alianza Atlántica, de la Unión Europea y del G7, esta última convocada por Alemania.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, visitará Polonia el próximo 25 de marzo tras participar en Bruselas en las cumbres de la OTAN, de la Unión Europea y del G7 sobre la invasión rusa de Ucrania, anunció este domingo la Casa Blanca.
La portavoz del Gobierno estadounidense, Jen Psaki, informó en un breve comunicado que Biden viajará a Varsovia desde la capital belga para reunirse con su homólogo polaco, Andrzej Duda.
"El presidente abordará cómo Estados Unidos, junto con nuestros aliados y socios, está respondiendo a la crisis humanitaria y de derechos humanos que ha creado la guerra injustificada y premeditada de Rusia contra Ucrania", dijo Psaki.
Biden viajará a Polonia, país vecino de Ucrania y miembro de la OTAN, apenas dos semanas después de la visita de la vicepresidenta, Kamala Harris, quien anunció en Varsovia la entrega de 50.000 millones de dólares a Ucrania y el despliegue de dos baterías de sistemas antimisiles Patriot en territorio polaco.
El presidente estadounidense habló por teléfono a principios de marzo con Duda, a quien agradeció su "hospitalidad" por acoger a los refugiados ucranianos que huyen de la invasión rusa.
Antes de visitar Polonia, Biden volará el miércoles a Bruselas para participar el jueves en una cumbre de la OTAN, otra de la UE y una del G7, esta última convocada por Alemania, que ostenta la presidencia de turno del grupo de naciones más industrializadas del mundo.
Esta será la segunda vez que Biden asistirá presencialmente a una cumbre de líderes de la OTAN en Bruselas, tras la celebrada el 14 de junio pasado.
La portavoz de la Casa Blanca descartó este domingo que Biden tenga planes de visitar Ucrania durante su viaje a Europa.
La invasión rusa de Ucrania, iniciada el 24 de febrero tras semanas de tensión en la frontera por la acumulación de tropas rusas, ha provocado la huida de 3 millones de refugiados y la muerte de al menos 900 civiles, según la ONU.
