El presidente de EE.UU., Joe Biden, aterrizó este viernes a Corea del Sur, donde inicia su primera gira por Asia con el foco puesto en reforzar la cooperación económica y militar con aliados como Seúl y la rivalidad con China y Corea del Norte de trasfondo.
El Air Force One presidencial tocó tierra un poco después de las 17:20 hora local (03:20 hora chilena) de este viernes en la base aérea estadounidense de Osan, unos 70 kilómetros al sur de Seúl, donde Biden fue recibido por el ministro de Exteriores surcoreano, Park Jin.
La visita de Biden llega en un momento de continuas tiranteces con China y con Corea del Norte realizando preparativos, según Washington y Seúl, para lanzar otro misil balístico intercontinental (ICBM) y llevar a cabo su primer test nuclear desde 2017.
Responsables de seguridad surcoreanos y estadounidenses creen de hecho que uno de estos ensayos puede producirse durante la estadía de Biden en la región, que durará cinco días y tendrá su próxima parada en Japón, a donde el mandatario viajará el domingo.
Nada más aterrizar, Biden puso rumbo al campus de semiconductores que el gigante Samsung Electronics tiene en Pyeongtaek, donde se encuentra la misma base de Osan.
Se cree que el líder del conglomerado, Lee Jae-yong, guiará personalmente a Biden en su visita y que podría mostrar sus últimos avances en semiconductores de 3 nanómetros con la vista puesta en la fábrica que Samsung decidió el año pasado que abrirá en la localidad estadounidense de Taylor (Texas, Estados Unidos) con vistas a fortalecer la producción y cadenas de suministro globales.
La resiliencia de las cadenas de suministro es un tema central en el viaje de Biden a Asia nororiental, puesto que está previsto que durante la visita presente formalmente el Marco Económico del Indopacífico (IPEF), iniciativa de cooperación regional diseñada para fortalecer el comercio y la inversión entre EE.UU. y la región al margen de China.
Biden tiene previsto celebrar una cumbre mañana con el flamante presidente surcoreano, el conservador Yoon Suk-yeol, que accedió al cargo hace apenas 10 días.
Entre los principales temas a tratar, además de la adhesión de Seúl al IPEF, están el de las intenciones de Corea del Norte, que no ha mostrado interés en retomar el diálogo y está haciendo un número récord de pruebas de armas este año, y si EE.UU. debe incrementar o no la presencia de sus activos en el Sur para proteger a su aliado de Pionyang.