El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, designó este miércoles a la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, para representar a Estados Unidos ante la ONU, en lo que constituyó el primer nombramiento de una mujer para un puesto clave en su futuro Gobierno.
Además designó como secretaria de Educación a Betsy DeVos, la primera mujer de su gabinete ministerial y quien es reconocida por ser una defensora de que los padres puedan usar fondos públicos para llevar a sus hijos a escuelas privadas o religiosas.
Haley, de 44 años y gobernadora de Carolina del Sur desde 2011, se opuso a Trump durante el proceso de primarias del Partido Republicano y brindó su apoyo, primero, al senador por el estado de Florida, Marco Rubio, y cuando éste fue eliminado, al senador por Texas, Ted Cruz.
A pesar de esa inicial oposición, el nombre de Haley sonó como posible compañera de fórmula de Trump como candidata vicepresidencial, puesto que acabó en manos del gobernador de Indiana, Mike Pence.
En tanto, DeVos, de 58 años, fue presidenta del Partido Republicano en Michigan y actualmente dirige la American Federation for Children, un grupo que propugna una mayor expansión de la opción que permite a los padres utilizar fondos públicos para llevar a sus hijos a escuelas de su preferencia, sean privadas o religiosas.