El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. prohibió este miércoles a las agencias gubernamentales usar el software de la multinacional rusa de ciberseguridad Kaspersky Lab debido a la posibilidad de que el Kremlin use a esa empresa para espiar a Estados Unidos.
"El Departamento de Seguridad Nacional está preocupado por los lazos entre algunos oficiales de Kaspersky y la inteligencia rusa, así como otros miembros del Gobierno ruso", indicó en un comunicado el propio Departamento (DHS, en sus siglas en inglés), encargado de asuntos de ciberseguridad.
Ese departamento expresó especial preocupación por las leyes rusas que permiten a la agencias rusas de inteligencia solicitar o reunir información de Kaspersky.
"El riesgo de que el Gobierno ruso, ya sea por sí solo o en colaboración con Kaspersky, pueda capitalizar el acceso que le otorgan los productos Kaspersky para poner en peligro los sistemas federales de información, afecta directamente a la seguridad nacional de EE.UU.", afirmó el DHS.
La orden para prohibir el uso del software de Kaspersky la dio la secretaria en funciones del Departamento de Seguridad Nacional, Elaine Duke, quien firmó hoy una directiva al respecto.
Según lo establecido en esa directiva, los departamentos y agencias del Gobierno deben identificar el uso o la presencia de los productos de Kaspersky en un plazo de 30 días para luego, en 60 días, desarrollar planes que permitan la eliminación de esos productos.
De esa forma, en 90 días, el software de Kaspersky comenzará a ser eliminado de todos los computadores, tabletas, teléfonos celulares y otros aparatos electrónicos del Gobierno de EE.UU.
La decisión llega unos meses después de que la agencia encargada de las compras del Gobierno, la Administración de Servicios Generales (GSA por su sigla en inglés), retirara a Kaspersky de la lista de empresas a las que puede comprar diferentes tipos de software, como programas antivirus.
Estados Unidos ha vinculado a Rusia con importantes ataques informáticos, como el que sufrió el año pasado el Comité Nacional Demócrata (DNC, en inglés).
Fruto de ese ataque, en julio del año pasado, el portal WikiLeaks publicó más de 19.000 polémicos correos electrónicos en los que funcionarios del Partido Demócrata hablan de tácticas para vencer a Bernie Sanders, rival en las primarias de Hillary Clinton, quien salió derrotada en las elecciones presidenciales frente a Donald Trump.
La respuesta de Kaspersky
La empresa rusa se manifestó que "teniendo en cuenta que el Laboratorio Kaspersky no tiene conexiones políticas con ningún Gobierno del mundo, estamos profundamente decepcionados con la decisión del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU".
Kaspersky, informó a través de un comunicado, se propone suministrar al país "toda la información para demostrar que dicha decisión no tiene fundamento".
Según la firma rusa, las acusaciones vertidas por las autoridades norteamericanas se cimentan en "afirmaciones falsas y conclusiones incorrectas" sobre la influencia de la legislación rusa en el funcionamiento de Kaspersky y supuestos riesgos políticos.
"La compañía no tiene contactos ni afiliación política con ningún Gobierno, incluido el ruso", insistió, y destacó que ha mantenido unos altos estándares durante 20 años de trabajo en la industria de la seguridad informática.
Recordó que toda la información que llega a manos del Laboratorio Kaspersky de sus clientes, incluido el tráfico, está protegida, incluido con la ayuda de certificados cifrados.
La nota insiste en que Kaspersky lamenta que una compañía privada pueda ser considerada "culpable sin pruebas bajo la presión de la actual situación geopolítica", pero se mostró convencida de que la ulterior investigación demostrará que "las acusaciones presentadas con gratuitas".