Ambos presidentes sellarán el nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas.
La capital europea contará con un contingente de 5.000 policías.
Cerca de 5.000 policías, expertos en guerra química y biológica, aviones de combate y el Ejército garantizarán la seguridad en Praga durante la firma del nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START), que será suscrito por los presidentes de EEUU, Barack Obama, y de Rusia, Dmitri Medvédev.
"Praga, el Castillo de Praga y las embajadas de Estados Unidos y Rusia estarán entre los lugares más seguros del mundo", afirmó el jefe de la Policía checa, Oldrich Martinu, en referencia al dispositivo de seguridad.
"Desde hoy hasta el viernes habrá cerca de 5.000 policías, la mayoría de los cuales procede de la dirección regional de la capital", informó Jaroslav Ibehej, portavoz policial.
Esa cifra quintuplica el número habitual de agentes que patrullan la capital checa en una jornada normal.
También intervendrán en el dispositivo agentes del Departamento de Protección de Altos Cargos, el servicio de seguridad de Presidencia, artificieros, comandos especiales, la Policía militar y cuerpos especializados en protección química, biológica y nuclear.
El Ejército del aire desplegará una flota de aviones de combate y helicópteros de ataque para garantizar la seguridad del espacio aéreo.
"Estará también involucrada la Policía fluvial", dijo a Efe el portavoz policial, que afirmó que las medidas de seguridad serán mayores que las de hace un año, cuando Obama anunció en Praga su nueva visión sobre el desarme y la no proliferación de armas nucleares.
El operativo de seguridad y de restricción del tráfico afectará sobre todo a los alrededores del Castillo de Praga, donde tendrá lugar la firma del nuevo START; el céntrico hotel Four Seasons, donde esta noche se alojará el mandatario ruso; las embajadas extranjeras, y hoteles que acogerán a las delegaciones.
