La Oficina de Asuntos de Crímenes de Guerra explicó que muchos de los prisioneros en Cuba siguen recluidos por problemas para coordinar su repatriación.
Cerca de 100 de los más de 500 detenidos en la cárcel estadounidense en la bahía de Guantánamo, Cuba, están listos para ser liberados, pero toma tiempo negociar su repatriación a sus países de origen o es difícil encontrar terceras naciones dispuestas a acogerlos, afirmó Sandra Hodgkinson, "número dos" de la Oficina de Asuntos de Crímenes de Guerra.
En París, la funcionaria del Departamento de Estado de EE.UU. explicó que para repatriar a un detenido de Guantánamo a su país de origen, Washington necesita garantías de que será tratado de forma "humana" y también de que será "vigilado".
Por ello, negociar acuerdos con terceros países para su acogida también es "lento" y difícil, subrayó Hodgkinson, al señalar que "la mayor parte" de los países del mundo no quiere acoger a detenidos de Guantánamo.
Como ejemplo citó el caso de 16 uigures o musulmanes chinos, a los que la Casa Blanca está dispuesta a liberar desde hace casi dos años, pero a quienes "nadie quiere".
La secretaria adjunta explicó que EE.UU. no quiere enviarlos a China porque podrían ser "torturados".
Hasta la fecha, 260 de los más de 700 detenidos que han estado en Guantánamo han sido liberados, indicó la funcionaria.
Además, precisó que entre los liberados se ha podido identificar a una quincena que desde entonces han vuelto "al campo de batalla".
Sandra Hodgkinson también indicó que desde 2004 no han ingresado nuevos detenidos a Guantánamo.
Hace más de cuatro años, EE.UU. abrió este centro de detención en su base naval en Cuba para los sospechosos de terrorismo capturados en Afganistán, Pakistán u otras partes, en el marco de la lucha contra Al Qaeda.
Hodgkinson, quien justificó la negativa estadounidense de dar a los arrestados el estatuto de prisioneros de guerra, señaló que los "combatientes enemigos ilegales" no tienen una categoría específica en los Convenios de Ginebra.
Por ello, adelantó que será "absolutamente necesario" que la comunidad internacional acuerde un "régimen jurídico" para los "combatientes enemigos que matan a civiles". (EFE)
