El niño estuvo, en medio de altas temperaturas, frente al trabajo de su madre durante más de ocho horas.
El hecho ocurrió en en Pembroke Pines, en el estado de Florida, EE.UU.
Un lactante de un año murió después de que lo dejaran en un automóvil estacionado, en medio de altas temperaturas, frente al trabajo de su madre durante más de ocho horas.
El niño de sólo 17 meses, cuyo nombre no se ha difundido, fue encontrado el pasado viernes en un estacionamiento de Pembroke Pines, en el estado de Florida, EE.UU. alrededor de las 17.00 hora local, informó el briánico Daily Mail.
Las temperaturas ese día alcanzaron hasta 33,8 grados Celsius.
Los paramédicos llegaron a la escena e intentaron resucitar al bebé, que quedó en el automóvil durante ocho horas y media. Sin embargo, los esfuerzos no tuvieron éxito y el niño fue declarado muerto en la escena.
La madre había ido a trabajar el viernes por la mañana y había dejado al niño en una silla de seguridad para niños, según el Orlando Sun-Sentinel.
Lawrence Hashish, el abogado de la familia, dijo que la muerte del niño fue un trágico accidente: "Ella es una buena madre (...) Ella está muy orientada a la familia y muy involucrada en la iglesia".
El niño es el vigésimo cuarto, y el segundo en Florida, en morir en un automóvil caliente en los Estados Unidos en 2018, según KidsandCars.org.
