Kimberly Martines, de 23 años, envenenó a su hija para obtener la "atención" de su ex marido, según la Policía.
La pequeña Peyton falleció producto de una intoxicación aguda.
En caso de ser condenada, la mujer arriesga hasta 20 años de cárcel.
Una mujer de 23 años llamada Kimberly Martines es acusada de haber matado a su hija de 17 meses al alimentarla con cucharadas de sal.
La mujer, residente de Carolina del Sur, Estados Unidos, fue arrestada y enfrenta cargos por el delito de homicidio por maltrato infantil por la muerte de la pequeña Peyton, que falleció tras una intoxicación aguda por la sal.
La menor fue trasladada el domingo pasado hasta el hospital y murió el miércoles, después de haber agonizar y mantenerse con vida sólo por el apoyo médico, informó People.
Los galenos habían alertado a las autoridades por la cantidad de sal que había en el cuerpo de Peyton y las investigaciones posteriores revelaron que Martines había alimentado consistentemente a su bebé con "cucharadas de sal".
Kevin Bobo, teniente de la Policía, informó a los medios que la mujer envenenó a su hija con el objetivo de atraer la "atención" de su ex marido y que este "volviera a su casa".
En noviembre de 2015 el pediatra de Peyton ya había mostrado preocupación por el bajo peso y retrasos en su desarrollo que exhibía la niña. Ésta fue derivada a otros expertos, pero la madre nunca concretó una cita con ellos.
Otros dos hijos de la mujer se encuetran ahora bajo el cuidado del Departamento de Servicios Sociales.
De ser condenada, Kimberly Martines arriesga hasta 20 años de cárcel.
