Autoridades confirmaron 11 fallecidos tras tiroteo en sinagoga de Pittsburgh
El sospechoso, identificado como Rob Bowers, de 46 años, se encuentra bajo arresto.
Otras seis personas resultaron heridas, incluidos cuatro agentes policiales.
El sospechoso, identificado como Rob Bowers, de 46 años, se encuentra bajo arresto.
Otras seis personas resultaron heridas, incluidos cuatro agentes policiales.
Las autoridades confirmaron 11 muertos y seis heridos a causa del tiroteo que tuvo lugar este sábado en una sinagoga de Pittsburg (Pensilvania, EE.UU.), informaron fuentes oficiales.
"Ha habido 11 muertes como resultado de este tiroteo, ninguno de ellos ha sido un menor. Además, hubo seis heridos, incluidos cuatro agentes de la Policía. Eso no incluye al sospechoso", declaró en rueda de prensa el director de los Servicios de Seguridad de Pittsburg, Wendell Hissrich.
El sospechoso, identificado como Rob Bowers, de 46 años, se encuentra bajo arresto, pero fue trasladado a un hospital cercano para recibir tratamiento médico.
El agente especial del FBI Bob Jones confirmó que Bowers reside en Pittsburgh y anunció que en las próximas horas se procederá a un minucioso registro de la vivienda, el vehículo y las redes sociales del sospechoso.
Jones calificó lo sucedido de "acción odiosa" y aseguró que no había visto una escena del crimen tan terrible en toda su carrera profesional.
Los hechos tuvieron lugar en torno a las 10:00 hora local (14:00 GMT) cuando Bowers accedió al templo de la Congregación del Árbol de la Vida y comenzó a disparar de manera indiscriminada al tiempo que gritaba: "Todos los judíos deben morir".
El gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, también presente en la rueda de prensa, sostuvo que el antisemitismo "no tiene cabida alguna" en su estado.
"Cualquier ataque contra una comunidad de Pensilvania es un ataque contra toda la comunidad de Pensilvania", afirmó Wolf.
Las autoridades creen que Bowers actuó por cuenta propia, pero no descartan que alguien más pudiera haber estado implicado en la planificación del ataque, por lo que pidieron prudencia a los vecinos de la zona.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró que el tiroteo "definitivamente" parece ser un crimen antisemita, a la vez que lamentó que estos sucesos "sigan pasando" en el país.